Hola a todos.
Al comienzo, los Reyes Magos me regalaron una pala Varlion TI8.8 de unos ciento y pocos euros que apenas me duro un mes y medio porque la reventé por varios sitios aprendiendo a jugar cerca de la reja. Durante un viaje a Madrid, pude jugar un partidillo en El Estudiante con unos amiguetes, y aproveché para comprar una pala “de maletero” a un profesor de los que por allí había. Era una SANE Carbon Agresor FOAM modelo 2.008 y dicho profesor me estuvo explicando la importancia de comprar una pala con forma redondeada que tiene un punto dulce mayor, para que los que estamos empezando no mandemos un montón de bolas fuera. Llevo por lo tanto siete meses jugando con ella y estoy seguro de que tendrá no menos de 100 partidos. La verdad es que me ha parecido una buena pala, muy duradera y difícil de romper porque a pesar de tener varias marcas en el canto de los golpes contra los cristales o la reja, la pala esta en perfecto estado y seguro que podría jugar muchos más partidos con ella. Es una pala bastante equilibrada, porque tiene un control razonablemente bueno y despide bastante para los escasos 360 gramos que pesa. Tiene un sonido característico que hace que algunos se den la vuelta cuando le pegas fuerte y quizas su característica más destacada es que se trata de una pala de tacto muy blando. Gracias al FOAM, se nota mucho el tacto con la pelota y una vez que te has acostumbrado a esa forma de “recibir” la bola, es muy difícil volver a la EVA. Hace un par de meses, comencé a buscar una sustituta que fuese capaz de adaptarse a mi juego; es decir, que tenga un control más o menos bueno, y que despida bastante para traérmela o sacarla por tres con más facilidad.
Os leí bastante y leí varias pruebas de palas y me decidí por la Vision VKing moderna que lleva Juan Martín, pero la probé durante un par de partidos y me fue imposible acostumbrarme a ella. Estaba superincómodo (me pareció increíblemente dura y no podía controlar la bola) y como me dieron la posibilidad de devolverla, enseguida la llevé al comercio y me devolvieron la pasta.
Siguiendo con la búsqueda de una nueva pala, probé brevemente (un solo SET) la Varlion LWC3. Me pareció una buena pala que hacía que la bola fuera donde yo quería pero había algo que no me terminaba de convencer. No terminé de encontrarme a gusto y la dejé en reserva porque me parecía mucha pasta sin tener la certeza de que fuera lo que realmente quería. A continuación empecé a leer sobre Paddel Coach y ví que era una empresa muy seria con una fabricación muy cuidada, con una gran carga tecnológica detrás y sobre todo muy bien pensada y probada en el mundo real. Tuve la ocasión de jugar un partido con una Bitubox Big Boss MIX y a pesar de ser una pala superada por la sustituta Grand Bitubox Mix de la cual Songoku hizo un estupendo análisis, me dio unas sensaciones muy buenas y decidí que mi nueva pala iba a ser una Padel Coach con núcleo MIX (Foam-EVA-Foam).
Ahora quedaba decidirme por el modelo en concreto. Ni corto ni perezoso llamé a Paddel Coach donde pude hablar directamente con el dueño y creador de las palas, el amable Sr. Jaime Camps. Después de explicarle mis características de juego y mi talla y peso, me dijo que SI o SI, tenía que escoger un modelo de al menos 385 gr. de peso. (más o menos recomienda que el pico de los trescientos gramos coincida con el peso del jugador, sin tener demasiado en cuenta la altura). Cuando le hablé de que me parecía excesivo ya que con el overgrip me iba a ir fácilmente a más de 390 gramos me explicó claramente que lo importante no es tanto el peso de la pala, sino como esté distribuido. Me puso el ejemplo de un martillo, que aunque siempre pese igual depende de si lo coges por el mango o por la maza la manejabilidad es completamente diferente. Me dijo que la Grand Bitubox era un pelín más exigente con las habilidades del jugador aunque si le daba siempre con la parte alta de la pala saldría incluso más que la Tritubox. De la tritubox me dijo que le dieses con lo que le diese la bola salía como un misil y que no era tan exigente, pero que tuviera en cuenta que al principio se me iría fuera un montón de bolas porque realmente despedía una barbaridad. Haciéndole caso, me pedí una Tritubox de 385 gramos que me ha llegado esta mañana y que he podido probar a mediodía en un partidito de hora y media.
La verdad es que estoy muy contento con la decisión que he tomado. Voy a tratar de no entusiasmarme, ni de hacer proselitismo como un “fanboy” cualquiera y ser lo más honesto posible con mi análisis.
He comprado un PALÓN.
La pala destila calidad de construcción por los cuatro costados. No se lo que durará jugando a este ritmo, pero comparada con la SANE parece una pala de verdad contra una de juguete. Tiene un ruido de golpeo realmente adictivo. Me gustaba mucho como sonaba la SANE, pero ésta, que en un peloteo normal suena bien, al hacer un remate provoca las miradas de todo el mundo. La sensación de recoger la pelota de la Sane la sigo teniendo y si me apuras incluso más acrecentada, porque me permite dirigir la bola de forma más sencilla a sitios donde antes no me planteaba llegar. Nada que ver con la dureza de la Vision ni siquiera de la LWC3. Pala de tacto blando pero muy preciso. La pala despide mucho. Como todavía no controlo muy bien los remates lejanos a la red, los 3 que he intentado se han ido directos al cristal, pero en cambio otros tres cercanos a la red, me la he traído a mi campo fácilmente y con una altura muy considerable. Defendiendo en la red golpes duros de los oponentes, voy a tener que aprender a amortiguar un poco esas bolas, porque con sólo poner la pala se me han ido directos al cristal también, donde antes era capaz de mantenerlos en el campo contrario. A pesar de los 385 gramos no se me ha hecho pesada en ningún momento porque está muy bien balanceada y me parece super-equilibrada. No se que pasará en partido más largos ( a veces no tiramos más de dos horas) pero creo que aguantaré bien. En definitiva, me parece una pala muy maja. Despide mucho que es lo que yo quería, tiene un control bastante majo, me “obedece” bastante bien si soy capaz de ejecutar el golpe adecuadamente y tiene un tacto y un sonido sublime, fruto creo yo de la mezcla de compuestos en el núcleo de la pala.
Este fin de semana jugaré varios partido porque tengo un torneíllo con cena social el sábado y podré probarla más a fondo. Ya os contaré sensaciones pasados unos días a ver si me reafirmo en lo dicho o cambio de parecer.
Gracias al Sr. Camps por su ayuda y a vosotros por leer este pedazo de ladrillo.
Fuente: javierg1080p