En mi poinión, aquí hay tres casos, creo yo.
Una cosa es jugar con alguien de un nivel claramente inferior a los otros jugadores. En ese caso, el pobre fallará como un bellaco porque no será capaz de seguir el ritmo de juego y las bolas que para los otros jugadores son normales, para el serán "galácticas" y fallará la mayoría. Aquí no queda mas que aguantar y tartar de que todo pase pronto.
Otra cosa es jugar con alguien al que no le falla el nivel, pero que simplemente tiene un mal día. Nos puede pasar (y nos pasa) a todos. En este caso, yo creo que los ánimos y la comprensión pueden ser positivos (no como en el caso anterior, que son absolutamente inútiles) y pueden cambiar la situación.
El tercer caso es el peor y el que a mi me pone de los nervios. El compañero que, teniendo un nivel suficiente que le haría seguir perfectamente el juego, se juega la mayoría de las bolas en golpes imposibles de los que falla 8 de cada 10. Y lo peor es que cuando mete uno chilla y se emociona como si hubiera hecho algo de nivel WPT. Estas bolas acertadas le retroalimentan y cada vez las intenta con mas asiduidad. Con estos tios, lo mejor es no jugar para evitar mosqueos y malas palabras. Aquí lo que hay que hacer es decirle claramente que se corte un poco y que se dedique a jugar como sabe, aunque solo sea por respeto al compañero.
Esta es mi opinión, despues de lo que he visto en el poco tiempo que llevo jugando.
Saludos.
Yo he sufrido el tercer caso, añadiendo que no lucha todas las bolas por igual, según le de corre a una dejada o se queda mirando, si vas perdiendo 4-2 él decide si luchar por remontar o lo tira a la basura jugándose golpes sin ningún sentido..., todo esto mientras tú te dejas la piel en la pista...
No he vuelto a jugar con esa persona, tardé poco en decirle que se acabó, que me faltaba al respeto a mí y a los rivales (en más de una ocasión he pasado vergüenza ajena...), que pensase en el partido y en los otros tres jugadores, no en lo que a él le apetecía en cada momento..., no se lo tomó bien pero fuera de la pista tenemos muy buena relación, si sigo jugando con él acabamos a palos seguro.
Por cierto, no soporto al típico que se pone a soplar y poner malas caras cuando fallas , en partidos igualados y jugando en las mismas condiciones hay personajes que creen no tener culpa nunca de nada cuando las cosas no van bien, y cuando van bien por supuesto es en gran parte gracias a ellos...
No hay nada como un buen partido en lo que te dejas todo en la pista con compañero y rivales respetuosos y siendo todos objetivos y autocríticos cuando toca, y animando. He visto parejas jugando a gran nivel envidiables en este sentido.